El comportamiento y los logros de un prisionero en prisión son factores que se toman en cuenta en todas las decisiones de libertad condicional. Los miembros de la familia de un prisionero deben animarlo para que siempre tenga un registro limpio de conducta disciplinaria; que participe en los programas educacionales, vocacionales y de desarrollo de carácter que les ofrecen en prisión. También muchas veces el prisionero depende de la familia o de amigos para planear un buen plan de libertad condicional. Esto incluye un trabajo y un lugar donde vivir.
Un prisionero debe pedirles a la familia, amigos y parientes que le ayuden a buscarle un lugar donde vivir, un trabajo, un medio de transporte y apoyo moral. Si el origen del problema del prisionero está relacionado con el ambiente donde piensa volver, se le aconseja que viva en otro lado.
Si no hay manera de ayudar a un prisionero en la comunidad, la Sección de la División de Libertad Condicional y Procesamiento de Liberación puede ayudarlo consiguiéndole una casa de transición. En este caso el prisionero debe contactar a un oficial de libertad condicional para que le ayude.
Los prisioneros con crímenes relacionados con alcohol o con drogas deben buscar un lugar donde hay asistencia disponible para estos problemas. (Los prisioneros pueden avanzar en su busca de trabajo adquiriendo sus actas de nacimiento y número de seguro social antes de que el CID (Cédula de Identificación Criminal) los mande o los pueden conseguir con la División de Integración de Reingreso.